Florianópolis, 28 de julio de 2017
Queridos Caro y Alejo,
Nunca tuve el don de la palabra que ustedes tienen la fortuna de poseer. Mis palabras serán breves, aunque mis sentimientos hacia los dos sean indescriptiblemente grandes. La verdad es que no sabría decir cuál de los novios me podría haber invitado; los dos naturalmente. Caro y Alejo, ustedes han sido mis amigos desde que éramos tan sólo unos adolescentes; vivimos juntos las alegrías, las angustias y los desafíos que implicó pasar por la universidad juntos y seguimos compartiendo a la distancia los ires y venires de la vida.
El amor que hoy están celebrando es motivo de alegría, orgullo y esperanza para quienes los rodeamos y compartimos con ustedes sueños y vivencias. Gracias por dejarnos vivir a su lado este gran amor que se tienen. Desde la distancia les envío un enorme abrazo a los dos y les deseo que el brillo de sus ojos siga tan fuerte como hoy.
Los quiero profundamente…
Alejandro Angel